Por Juan Godoy*
La Fuerza de
Orientación radical de la Joven Argentina (FORJA), realizó a lo largo de su
existencia (1935-1945), unos 4000 actos-conferencias, a veces estos consistían
en subirse a un cajón en una esquina y comenzar a hacer las denuncias ante
quien pasara por la calle. Aquí nos tomamos “el atrevimiento” de pensar un
discurso forjista en relación al macrismo.
Compatriotas! Estamos acá reunidos
otra vez para denunciar la intención del gobierno de Mauricio Macri de volver a
hacer de la Argentina un país
semi-colonial, esta vez no de Inglaterra como en los 30, sino de los
Estados Unidos. Es menester dar cuenta que el “nuevo gobierno” poco tiene de
nuevo y mucho de viejo: las recetas son las mismas, y las consecuencias también
lo serán. Este “nuevo gobierno” viene a tomarse una revancha clasista sobre el movimiento nacional que llevó los
destinos de nuestra Patria estos últimos 12 años, y hacer una enorme
transferencia de recursos de los sectores populares a las minorías
oligárquicas.
El Gabinete nombrado no deja dudas
acerca de la política que pretenden llevar a cabo, tenemos desde los que
llevaron el país a la debacle del 2001, tipos ligados a las empresas
monopólicas extranjeras, a la represión de la última dictadura cívico-militar,
personajes que están a favor del trabajo infantil, de cerrar el parlamento, relacionados
con el imperialismo, con los “fondos buitres”, y demás yerbas. Este gobierno
representa, quizás como ningún otro en nuestra historia los intereses
extranjeros, de las empresas privadas y de las minorías oligárquicas.
Nos hace acordar a ese gobierno que
en los 30 de los 8 ministros, tenía cuatro tenían vínculos con petroleras
extranjeras, otros con la Sociedad Rural y otros con capitales alemanes.
Quieren volver a endeudarnos, o mejor dicho a encadenarnos, porque “la deuda externa se ha convertido en una
actualizada forma de esclavitud”. Quieren entregar nuestros recursos, dejar
de lado la industrialización incipiente, y volvernos al primitivismo
agropecuario y a la tiranía del sector financiero.
Las primeras medidas no dejan lugar
a dudas, quita de impuestos a los más ricos, dejar de lado la captación de la
renta agraria diferencial, tarifazo para los trabajadores, jueces por decreto,
silenciamiento a la prensa opositora, represión, encarcelamiento de luchadores
sociales, políticos y gremiales, despidos masivos de trabajadores, giro de una
política latinoamericana a un “nuevo alineamiento” con el imperialismo yanqui y
británico, vuelta a la agenda del proyecto neocolonial del ALCA, “nuevo ciclo”
de endeudamiento (vuelta al FMI-BM), liberación de las importaciones, y para
colmo: ¡devaluación que liquida de “un saque” el 50 % de los salarios! Nosotros
luchamos porque “queremos ser una
argentina libre, de todo imperialismo extranjero, cualquiera sea la ideología
con que pretenda encubrir nuestra explotación”.
Las decisiones en estos años, es
evidente, no se van a tomar en nuestro país, y menos aún según el interés de la
nación (que es el del pueblo), nosotros pensamos que es necesario “que miremos desde aquí nuestros propios
problemas”. A los problemas nacionales se los enfrenta con criterio
nacional. Hacemos un llamado a pensar en
nacional.
Quieren que dejemos de mirar hacia
el interior de la Gran Patria Grande, ¡Nuestra América!, y volvamos los ojos
hacia el norte, nosotros al contrario “sostenemos
la necesidad de instaurar la unión efectiva de las naciones de América para
realizar su emancipación, imposible mientras perdure la desarticulación”, por
eso “debemos luchar por la organización
de los pueblos oprimidos de América Latina para su liberación y defensa”.
Estos cipayos quieren “atrasar el
reloj de la historia”. Tuvimos la década infame como bien llamó Torres a la
década del 30, tuvimos una segunda década infame en los años 90, y ahora
pretenden llevarnos a una tercera década infame, está en nosotros, en el pueblo
argentino evitarlo, para lo cual tenemos que tener en claro que “nuestra lucha, debe ser doble: contra el
enemigo extranjero que invade, y contra el nativo vendepatria que la entrega”, y
para ello pensamos que “¡sólo del pueblo
argentino, de la masa innumerable sin voz y sin más conocimiento que la certeza
de sus propias dificultades, puede surgir la salvación entera de la nación!”… Muchas
gracias por su atención…
* Sociólogo (UBA).
Docente IUNMA, UNAJ, UNLa. ¡Revista Ni un Paso Atrás! N° 48. Enero 2016.
Y quienes vimos nacer al peronismo desde días antes al 17 de octubre de 1945, (hoy firmante y entonces con diez años y un padre chofer sindicalista) me pregunto acaso lngenuamente, ¿los actuales herederos de semejante 'fuerza movilizadora', piensan suscribir a Macri o enfrentarlo? Eduardo Pérsico. (Escritor, ver en internet).
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